La violinista noruega Mari Samuelsen irrumpe en las salas de todo el mundo con interpretaciones que desprenden pura adrenalina y muestran un dominio excepcional de la técnica. En su debut en Barcelona, en el Palau de la Música Catalana, propone un programa sin fronteras, del Barroco a la contemporaneidad: de Bach a Richter pasando por Philip Glass y Arvo Pärt, acompañada por el pianista francés Julien Quentin.